El autoempleo es una modalidad de trabajo por cuenta propia, es decir, la persona trabaja para sí misma. Lo hace ejerciendo su actividad profesional en un comercio, oficio o negocio. La gestión de esta actividad empresarial corresponde solo al autoempleado y es el responsable de la generación de sus propios ingresos.
Como ya adelantamos, existen principalmente dos tipos de autoempleo:
Empresa unipersonal: Está conformada por un solo individuo, quien es su propietario, administra el negocio y se beneficia de las ganancias.
Autónomo : El trabajador no pertenece a una empresa, sino que ofrece sus servicios de manera independiente.
El autoempleado crea su propio puesto de trabajo , utilizando su ingenio, su capital y su esfuerzo para generar oferta de trabajo, y a medida que pase de ser un emprendedor a ser un empresario, con el tiempo puede convertirse en un generador de empleo para más personas.
El objetivo de un autoempleado es dinero, obtener un beneficio y rentabilidad económica e incrementar el patrimonio personal y de la empresa. Trabajar para uno mismo, desarrollando nuestras propias iniciativas y proyectos, ser el propio jefe. Auto realizarse, obtener prestigio social y reconocimiento profesional.
Rubén Carbonell